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Los piercings en la oreja son una de las formas más populares y comunes de modificaciones corporales. Pero una vez que el piercing ha sido realizado, es importante seguir una serie de cuidados para evitar infecciones y promover una curación rápida. En este artículo, te presentamos los cuidados esenciales para el piercing de oreja.
¿Cómo cuidar el piercing recién hecho?
El cuidado del piercing de oreja es esencial, especialmente en las primeras semanas después de haberlo hecho. A continuación te presentamos los cuidados que debes seguir:
Limpieza diaria
Limpia el piercing dos veces al día con una solución salina, que puedes comprar en una farmacia o hacer en casa. Para hacer una solución salina, simplemente disuelve una cucharadita de sal en una taza de agua tibia. Usa un algodón o un hisopo para aplicar la solución salina en el piercing.
Evita tocar el piercing
Evita tocar el piercing innecesariamente con las manos sucias. Si necesitas tocar el piercing, asegúrate de lavarte las manos con agua y jabón antes de hacerlo.
No cambies el piercing antes de tiempo
No cambies el piercing antes de que haya cicatrizado completamente. Generalmente, deberás esperar alrededor de 6-8 semanas antes de cambiar el piercing. Si cambias el piercing antes de tiempo, puedes provocar una infección o retrasar la curación.
Evita el uso de productos químicos
Evita el uso de productos químicos como cremas, lociones o perfumes cerca del piercing. Estos productos pueden irritar la piel o causar infecciones.
Cuidados a largo plazo
Una vez que el piercing ha cicatrizado, es importante seguir cuidando la zona para evitar infecciones y mantener el piercing saludable. A continuación te presentamos los cuidados que debes seguir:
Limpieza diaria
Continúa limpiando el piercing dos veces al día con una solución salina. Esto ayudará a mantener el piercing limpio y evitar infecciones.
Gira el piercing
Si usas un piercing de aro, gira el piercing diariamente para evitar que se pegue a la piel. Sin embargo, si usas un piercing de barra, no necesitas girarlo.
Usa joyería de calidad
Usa joyería de calidad, preferiblemente de acero inoxidable o titanio. Evita el uso de joyería de baja calidad o de materiales alérgenos.
Evita golpes
Evita golpear o tirar del piercing, ya que esto puede causar daños en la piel y retrasar la curación.
Conclusiones
En resumen, los cuidados del piercing de oreja son esenciales para evitar infecciones y promover una curación rápida. Recuerda limpiar el piercing diariamente con una solución salina, evitar tocar el piercing innecesariamente, no cambiar el piercing antes de tiempo, evitar el uso de productos químicos, usar joyería de calidad y evitar golpes. Siguiendo estos cuidados, podrás mantener tu piercing de oreja saludable y lucirlo con orgullo.
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